El pasado 3 de abril del 2007, mientras don
Reynaldo Moya, en su computadora, realizaba un trabajo de
investigación sobre la historia del virreynato en Piura, su
esposa, doña Alicia le entregaba un sobre manila, que instantes
antes recibía de un mensajero del correo postal. Yo, Lucho
Adrianzén, era testigo privilegiado de aquel momento.
- ¿Qué será esto? Interrogaba el
historiador, dejando de “teclear” en la computadora y recibiendo
el impecable sobre.
- Ábrelo, pues y ya verás… le replicó
ansiosamente doña Alicia con su eterna sonrisa
Don Reynaldo procedió a rasgar cuidadosamente el
sobre por el lado de la pegadura y de sus entrañas extrajo dos
hojas tamaño “A-4”. Una era un diploma a todo color, en fino
papel tipo cartulina, con el membrete de la Academia Nacional de
la Historia.
Don Reynaldo lo leyó. La citada Academia lo
reconocía como miembro de esa institución, honor que pocos
estudiosos de historia obstentan.
Doña Alicia muy emocionada abrazó a su esposo y
le dio un beso en la frente, diciéndole espontáneamente: -Te
lo mereces por el trabajo que haces y que bueno que te lo den en
está época para que lo disfrutes. Por que a otros recién los
reconocen cuando ya no están en este mundo, te felicito-.
Doña Alicia muy entusiasmada salió del estudio con la intención
de comunicar a sus hijos tan agradable noticia.
- No esperaba esto- me decía don Reynaldo
- Se han demorado demasiado- repliqué
-Indudablemente Ud. se merece mucho más por el trabajo que
realiza-
La carta de presentación dice así:
Academia Nacional de la
Historia
Casa de Osambela
Conde de Superunda 298 Lima 1 Perú
Telefax (51 1) 427 79 87
Lima 30 de marzo de 2007-04-23
Profesor
D. Reynaldo Moya Espinoza
Sullana
Estimado amigo y colega:
La Academia Nacional de la
Historia, en junta del 29 de marzo del 2007, eligió a Ud. como
miembro correspondiente de la Corporación en atención a su
importante contribución al estudio de la historia regional del
Perú, especialmente en su departamento natal, Piura
Al comunicar a Ud. esta grata
noticia, tengo la complacencia de felicitarlo vivamente y
expresarle la satisfacción de la Academia de contarlo entre sus
apreciados miembros.
Me permito alcanzarle una
copia de los Estatutos de la Academia
Muy cordialmente
(firma)
José Agustín de La Puente Candamo
Presidente
Quienes quieran comunicarse con don Reynaldo, pueden hacerlo a
su correo elctronico
reymoes@hotmail.com
Ojalá que en los próximos días se rinda homenaje
a tan distinguido historiador, por el reconocimiento que ha
recibido de la Academia Nacional de la Historia
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