TOLERANCIA
CERO:
LA BURLA Y
EL DESPRECIO A LA VIDA DE LAS PERSONAS
ESCRIBE: LUIS GARNIQUE ORTIZ
El transporte terrestre de personas, de acuerdo a la Ley
General de Transporte, es un servicio público. En consecuencia se debe
exigir una prestación bajo condiciones de seguridad, puntualidad,
higiene y comodidad, cualidades mínimas que la autoridad competente debe
exigir, pues de no ser ello así se afectan DERECHOS FUNDAMENTALES DE LA
PERSONA, protegidos, como son: la defensa de la persona, el respeto a su
dignidad, el derecho a la vida, a su integridad física, y no ser
sometido a tratos humillantes.
Para la protección de esos derechos, en el servicio de
transporte, el Estado ha puesto limitaciones, mediante normas
reguladores, con el propósito que tales servicios se hagan sin
afectarlos, vía autorización previa o concesión; tal como ocurre con el
Reglamento de Administración de Transporte Terrestre, en el cual precisa
las competencias de cada una de las autoridades comprometidas.
Luego, es la autoridad quien debe exigir el cumplimiento
de dicha disposición y el prestador del servicio, cumplirlas, en lo que
se refiere a las características de los vehículos, la infraestructura y
organización requerida para la prestación del servicio.
Lamentablemente en nuestra Región, el transporte público
de pasajeros no reúne los requisitos de idoneidad señalados, y que será
materia de otros comentarios, pero anticipamos, esta falta de exigencia,
ha permitido que se produzcan lamentables y trágicos accidentes
automovilísticos generados por "transportistas", con pérdida del más
preciado patrimonio: la vida humana.
Es necesario, pues, desde esta tribuna levantar la
protesta enérgica, exigiendo a la autoridad el cumplimiento de sus
deberes y funciones, y a los seudos transportistas, el respeto por los
valores y las cualidades de las personas usuarias. Anticipamos, el
Ministerio de Transportes, anunció y nunca aplicó en las rutas hacia y
desde Sullana, la denominada acción de control TOLERANCIA CERO.
Preguntamos, ¿qué razón tuvo la autoridad de transportes para no
ejecutarlo?, si dicha acción de control, se anunció que era de
aplicación en todo el territorio patrio.
Esta interrogante, exige una pronta y transparente
respuesta, puesto que los servicios de transportes interprovinciales de
y hacia la provincia de Sullana, RESULTAN SER NO IDÓNEOS, y por el
contrario SON DEFICIENTES, prueba de ello la vida obsoleta y el mal
estado de sus unidades vehiculares, o la prestación con unidades no
autorizadas.
¿Estamos de acuerdo?, sino le pedimos se nos refute, pues
obra en nuestro poder la suficiente documentación que así lo demuestra y
que repetimos lo entregaremos en nuestra próxima edición, para que
conozca la máxima autoridad del Ministerio de Transportes, en uso de
nuestro derecho de participar en los asuntos públicos.
Exigimos esa pronta respuesta, pues, las autoridades de
transportes, son conscientes de la magnitud de riesgo a que son
sometidos los más de veinte mil usuarios que diariamente usan de
transporte terrestre, en vehículos de empresas, que de formales solo
tiene el nombre y la autorización, ya que un alto porcentaje de ellas,
con escasísimas excepciones, operan con vehículos que no responde a las
exigencias de operatividad, de seguridad, de comodidad y de higiene, lo
más grave se trata de vehículos que no forman parte de la flota
vehicular autorizada.
El último accidente de tránsito, que ha enlutado a
familias de Sullana y de Paita, (fallecieron 10 de 14 ocupantes de un
auto) ocurre, justamente por las deficiencias antes señaladas. Luego,
hoy en día viajar, importa el riesgo que podría sufrir en la integridad
o en la seguridad personal. Se ha puesto a pensar, como los prestadores
del servicio de transportes: desprecian su dignidad y su seguridad.
Basta, pues, de atropellos, defendamos la vida y nuestra dignidad,
exijamos respeto. |