EL
TALLÁN (E. T.):
A partir de 1983, con las lluvias, el problema de la comercialización
de productos se agudiza, de tal manera que la poca infraestructura
existente no es capaz de acoger a nuevos comerciantes para atender a
una población en constante aumento, por lo que se incrementa en una
forma desordenada el llamado mercadillo de Sullana. Han pasado varios
gobiernos municipales sin que tomen una decisión definitiva para
resolver este problema. Cual es en sí el fondo de este problema.
FERNANDO BROSSARD
(F.B): Pasa por la ausencia de una visión a mediano y largo
plazo. Nuestros gobernantes de turno no entendieron del crecimiento
poblacional, de la demanda de infraestructura y menos de un desarrollo
ordenado de la ciudad.
Se construyó un mercado
luego de las lluvias del 83, mucho menor del que habíamos tenido y de
allí no se pasó.
Se construye luego en
el área anexa, un segundo pabellón denominado “el hangar” pero
sencillamente los comerciantes se habían posicionado de la zona llamada
“la punta” o mercadillo. Se careció de capacidad para desconcentrar ese
sector comercial, y menos para lograr su reordenamiento.
Los comerciantes no se
instalaron en dicho lugar porque su infraestructura era insuficiente
para trasladar un número significativo de comerciantes que les
garantizara modificar el escenario comercial y lograr que los
consumidores modifiquen su costumbre de ir hacia el mercadillo,
sumándose a ello la especulación al fracaso en esta nueva área
comercial. La negativa fue acompañada por la inacción de las propias
autoridades para promocionar y convencer que esto daría resultados.
En el afán de
desconcentrar el área del mercadillo se construyó un nuevo mercado
denominado “satélite” en el AA.HH. “9 de Octubre” pero con la misma
dosis de ausencia de instrumentos para poder reordenar el comercio
anteriormente, ambas infraestructuras no tuvieron utilidad.
La gestión de José
Burgos atinó al formular el plan director de Sullana, donde ya se
reservaron espacios para el reordenamiento de la ciudad entre ellos el
del Mercado Mayorista ubicada al sur-oeste de la ciudad. A partir de
allí se abre una etapa importante para la modernización de Sullana con
la propuesta de ordenamiento, sin embargo los resultados nos muestran un
gran fracaso por la falta de efectividad de los siguientes gobernantes.
(E.
T.): Quienes deben asumir el compromiso para una solución a mediano y
largo plazo de este problema
(F. B.):
La solución debe involucrar a los diferentes actores del desarrollo,
partiendo de la convicción de la propia autoridad municipal que entienda
la necesidad de ordenar nuestro comercio, de propiciar la generación de
puestos de trabajo, de alentar y contribuir con la infraestructura
productiva y de crear mejores condiciones de vida para su población,
también es fundamental la participación de los comerciantes y los mismos
productores, de los transportistas y fundamentalmente de la actividad
privada que debe cumplir un rol muy importante por su capacidad de
financiamiento. La municipalidad debe cumplir un papel de
convocatoria, de facilitadora, de toca puertas, y de permanente
seguimiento y monitoreo.
Si de prioridades se
trata hoy la municipalidad provincial debe reflexionar y preguntarse si
es más prioritario, invertir más de tres millones de soles por
utilidades de su Caja Municipal en un centro de convenciones o en el
problema más crítico de la ciudad, que de acuerdo a su plan director
vigente es la zona denominada La Punta o mercadillo, que comprende desde
la “2 de Mayo”, Canal Vía, Av. Buenos Aires y vías colaterales, donde
el hacinamiento, la insalubridad, delincuencia y peligro de posibles
siniestros así lo demuestran.
(E. T.): Es factible desarrollar un proyecto para empezar a solucionar
este problema que pareciera que las autoridades municipales no quieren
encarar…
(F. B.):
En
Sullana caminamos al revés y contra la historia. Las grandes ciudades
modernas, primero desarrollan sus proyectos en función de su
ordenamiento. Califican sus espacios y formulan sus expedientes
técnicos. Convocan y concertan y en la que participa también la sociedad
civil. En Sullana nuestras últimas autoridades, ofertaron los espacios
al mejor postor, los expedientes técnicos son los grandes ausentes y la
sociedad civil desconoce su autoridad, frente a la concertación
encontramos desconcierto y en lugar de consensos y acuerdos hay
generación de conflictos.
(E. T.): Existiría una capacidad de financiamiento para una obra de
esta envergadura?
(F. B.):
Un proyecto de esta naturaleza por sus niveles de inversión puede
concebirse por etapas y con financiamiento tanto público en áreas de su
competencia, como privado fundamentalmente. Hay que evaluar que la
propia construcción y funcionamiento dinamizará otras actividades, donde
la municipalidad tendrá una intervención directa.
La legislación
transfiere los mercados de la municipalidad con grandes ventajas a los
propios comerciantes bajo formas de privatización. Por otro lado, aquí
en el propio Sullana pequeños comerciantes han demostrado ser capaces de
levantar su propia infraestructura, en consecuencia la autoridad
municipal debe liderar la iniciativa y empezar con la formulación del
expediente técnico del proyecto integral que demuestre y garantice su
viabilidad partiendo desde el tratamiento del comercio central, el
comercio intensivo y los ejes comerciales según los documentos
existentes. Hay barreras normativas que hay que superar en cuanto a la
inversión pública, pero dudo que alguien no entienda de la prioridad,
necesidad y viabilidad de un mercado para nuestra ciudad y de la
convocatoria al sector privado.
(E.
T.): Solucionaría esto el problema del comercio en la ciudad.
(F. B.):
En primer lugar esto sería una ayuda sustancial para el ordenamiento de
la ciudad. El problema mismo de la infraestructura comercial al por
mayor, se vería totalmente solucionado. Por otro lado sabemos
perfectamente que los mercados llamados modernos del sector privado
copan los espacios estratégicos en función de la demanda poblacional y
al igual que en las grandes ciudades estos negocios se desconcentran
incluso en áreas supuestamente marginales. El capital privado en estos
casos es un gran aliado en la solución del mercadeo y el desarrollo
local en general. El funcionamiento de pequeños y medianos mercados en
las áreas céntricas hoy existentes en Sullana con seguridad en los
próximos años los llevará a su desconcentración. Sin embargo al margen
de ello un área o mercado de almacenamiento y de distribución mayorista
que albergue a productores y comerciantes de esa envergadura y a su
propio alrededor un importante sector minorista, seguirá siendo una
necesidad para Sullana. Tome Ud. en cuenta la ubicación comercial
estratégica que tiene nuestra provincia en la propia región.
(E.
T.): El anterior alcalde, Vásquez, desalojó a muchos comerciantes del
llamado mercadillo de Sullana y los ubicó en la zona industrial en un
lugar inhóspito e inseguro, sin vías de acceso. El consumidor no acude y
los reubicados comerciantes han optado por volver ocupando nuevas
arterias aledañas a la avenida Buenos Aires….
(F. B.):
La falta de objetividad en el conocimiento de la realidad de la ciudad
le hizo caer en absurdos a la misma autoridad municipal. No se puede
concebir el desarrollo o funcionamiento de una actividad económica tan
dinámica desconectada de los servicios básicos, lejos de un transporte
suficiente y eficiente, de una misma agencia bancaria, etc, y por el
contrario llevando al sacrificio al propio comprador. La respuesta del
comerciante era obvia y ahí lo tenemos nuevamente en La Punta. Al margen
mismo de violentar el correcto uso de suelos, pues técnicamente nunca
nadie pensó en llevar a comerciante alguno a esa área.
(E.
T.): Crees que haya alternativas viables para una mediana solución
(F. B.):
Primero nuestras autoridades municipales deben mirar a nuestra ciudad
como la que quisiéramos los sullaneros, segura, ordenada y desarrollada.
En segundo lugar,
encaminar la iniciativa técnicamente, reformulando nuestro plan de
ordenamiento territorial, incorporando las áreas suficientes para el
desarrollo de todo proyecto específico y posteriormente ejecutando los
planes y proyectos garantizando su viabilidad y beneficios tanto
técnica, financiera y socialmente.
La calidad y empeño del
papel promotor del desarrollo de la provincia estará en manos de las
recién electas autoridades locales y de ellos dependerá las soluciones.
La ley y la realidad así lo determinan.
|